Hoy abordaremos el seguro de responsabilidad civil para traumatólogos.
Probablemente los traumatólogos es una de las especialidades que más tarde o temprano visitaremos. Ya sea por una fractura, o algún problema muscular o de ligamentos.
Evidentemente no todas las lesiones revisten la misma gravedad, pero la intervención del traumatólogo es esencial.
Cualquier error o negligencia en cualquiera de las fases puede suponer graves consecuencias.
Hoy por hoy nos encontramos en una sociedad cada vez más exigente en materia de errores médicos, lo cual se traduce en un incremento importante en el número de reclamación y en las cuantías.
El seguro de responsabilidad civil para traumatólogos es obligatorio para poder ejercer, pero ahora lo importante es que las coberturas sean proporcionales a los riesgos del profesional.
El 1 de enero de 2016 entro en vigor el nuevo Baremo de Accidentes de Tráfico, único legal en España para determinar las indemnizaciones por daños corporales y que es el que utilizan los tribunales.
Este nuevo baremo ha incrementado las indemnizaciones entre un 30% y un 50 % sobre el anterior, por lo que ya se están produciendo reclamaciones por cientos de miles e incluso millones de euros por presuntas negligencia médicas.
Estos incrementos han asustado ya a varias compañías que se hay retirado del ramo de responsabilidad civil médica, particularmente en las póliza de la sanidad pública de las comunidades autónomas, que están encontrado dificultades para conseguir coberturas.
Por ello recomendamos a los traumatólogos que revisen a fondo sus pólizas de responsabilidad civil, analicen si las coberturas que tienen son las adecuadas o es conveniente ampliarlas. Esto se puede hacer en cualquier momento, no hay que esperar al vencimiento de las mismas.
También el traumatólogo debería estudiar distintas opciones de cobertura, pues es muy frecuente que por unos euros más, se pueda comprar el doble o el triple de cobertura.
El seguro de responsabilidad civil para traumatólogo se ocupara de indemnizar las reclamaciones razonables que reciba el profesional, o bien defenderá judicialmente sus intereses.